
La Astrología es una pseudociencia basada en la relación existente entre los cuerpos celestes, las constelaciones del universo y las personas.
Se trata de una disciplina milenaria, compartida por muchas civilizaciones y con partidarios en todo el mundo, que parte de la suposición de que existe una correlación entre la configuración de las estrellas del firmamento y los eventos que tienen lugar en nuestro planeta.
El conocimiento del zodiaco se atribuye a los caldeos y asirios y se estima que fue descrito unos 1000 años a.C. Sin embargo, el conocimiento astrológico es universal, ya que fueron muy diversas las civilizaciones que utilizaron esta pseudociencia (mayas, aztecas, hindúes, incas, griegos o romanos).
Con respecto a la astrología hay dos posturas claramente diferenciadas y radicalmente opuestas. La de aquellos que están convencidos del vínculo existente entre las agrupaciones de constelaciones zodiacales y el destino del hombre y su carácter y la de quienes defienden que se trata de un conocimiento infundado, falso y que se basa en una creencia sin base empírica.

Los defensores de la astrología consultan el horóscopo o piden a un astrólogo que les haga su carta astral para así afrontar los designios de los astros. Los críticos se hacen preguntas sobre la verdad de estas afirmaciones planteando cuál es la fuerza concreta que une los astros con la vida de los seres humanos.
Además de las dos posiciones enfrentadas sobre la certeza del conocimiento astrológico, habría una tercera opción; la de quienes consultan el horóscopo con escepticismo pero al mismo tiempo con una cierta curiosidad por saber qué les puede ocurrir en un tema amoroso, laboral o económico.